La deficiencia de vitamina B12 se puede tratar por vía parenteral o por vía oral.

En pacientes con una deficiencia grave y presencia de sintomatología se recomienda utilizar la vía parenteral. Una vez corregido el déficit se puede valorar utilizar la vía oral como tratamiento de mantenimiento.

La administración de vitamina B12 por vía oral a dosis altas (1000μg/día) es suficiente para cubrir los requerimientos diarios.

En pacientes con problemas de absorción, una terapia a dosis altas de vitamina B12 (1000-2000μg/día) se considera efectiva.

En pacientes con deficiencia dietética (veganas, vegetarianas, niños en lactancia exclusiva materna de madres con deficiencia) se recomienda utilizar la vía oral.

En el momento de seleccionar una vía de administración u otra, se deben tener en cuenta otro tipo de factores como la adherencia, las características de los pacientes (personas ancianas, con problemas de absorción o deglución, anticoaguladas, etc.) y también el coste y las preferencias de los pacientes.